Decenas de sandieguinos salieron a las calles el jueves para las manifestaciones del Primero de Mayo en apoyo a los derechos de los trabajadores y para visibilizar las contribuciones de la fuerza laboral inmigrante del país ante las duras políticas migratorias del presidente Donald Trump.
Las calles de Hillcrest se llenaron de coloridas camisetas sindicales mientras casi 1000 manifestantes se dirigían desde el Centro Médico Hillcrest de la UC San Diego hasta el Parque Balboa por la mañana. Más tarde, en el Parque Chicano, cientos de manifestantes, muchos de ellos ondeando banderas de diversos países latinoamericanos, se congregaron bajo murales que representaban la lucha de la comunidad por la justicia social.
Marchas similares se llevaron a cabo en todo el país, con manifestantes llenando las calles de Los Ángeles, Chicago y Nueva York en conmemoración del Primero de Mayo, también conocido como el Día Internacional de los Trabajadores.
En el hospital de Hillcrest, cientos de empleados del sistema de salud UC San Diego, incluyendo especialistas en soporte técnico, farmacéuticos y embajadores de pacientes, se congregaron alrededor de las 10:00 a. m. cerca de la entrada del hospital para exigir mejores salarios y condiciones laborales durante una huelga de un día.
del Sindicato de Empleados Profesionales y Técnicos y de la Federación Estadounidense de Empleados Estatales, Condales y Municipales portaron pancartas y se congregaron frente a la entrada del hospital, por donde entraban y salían pacientes y médicos.
Los manifestantes corearon cánticos antes de que la multitud comenzara su marcha de 2,5 kilómetros hacia el Parque Balboa, junto con de las secciones locales del Sindicato de Trabajadores de la Alimentación y el Comercio (UFCW) y del Sindicato Internacional de Empleados de Servicios (SIE), que representan a quienes trabajan en todos los sectores, desde la atención médica hasta los servicios de alimentación y el comercio minorista.
La marcha paralizó temporalmente el tráfico en las calles, y la multitud se extendió por unas dos cuadras de la ciudad, pero no se reportaron incidentes a la policía de San Diego.
Los manifestantes se reunieron en el parque para escuchar discursos que elogiaban al trabajo organizado y llamaban a la solidaridad.
Randall Turner, quien trabaja en tecnología de la información en el Centro Médico del Campus Este de UC San Diego, dijo que se manifestaba contra la congelación de contrataciones impuesta por UC San Diego Health. Realiza mantenimiento y brinda soporte técnico a computadoras y otros equipos tecnológicos que los médicos y demás personal utilizan para tratar a los pacientes.
“Ya estamos en un punto crítico con nuestro personal, ya que tenemos que viajar a múltiples ubicaciones y realizar muchas tareas, y simplemente no se está brindando suficiente apoyo a todos nuestros centros al mismo tiempo”, dijo Turner.
Lisa Tiller, embajadora de pacientes del Centro Oncológico Moores de UC San Diego Health, quien ayuda a los pacientes con todo, desde el transporte hasta el alojamiento, dijo que ha estado “sintiendo la presión” de la cantidad de personal.
“Estamos sobrecargados de trabajo, mal pagados y con escasez de personal”, dijo.
En un comunicado, UC San Diego Health afirmó que “la atención excepcional al paciente sigue siendo nuestra principal prioridad”.
“Seguiremos monitoreando la dotación de personal y los recursos para mantener nuestros altos estándares de atención y nuestro compromiso con la comunidad”, decía el comunicado.
Más tarde, Ricardo Gómez, de 73 años, izando una bandera que representa al movimiento de los trabajadores agrícolas, se encontraba entre los cientos de personas que se habían reunido en el Parque Chicano en solidaridad con las luchas de los trabajadores. El residente de Logan Heights y veterano activista social formó parte del movimiento de protesta de 1970 que creó el parque.
“Los inmigrantes son quienes impulsan a este país”, dijo.
Se sumó a otros que expresaron su preocupación por los objetivos de deportación masiva de Trump.
“Es triste”, dijo. “Las mismas personas que lo dan todo por este país, incluso pagan impuestos, están siendo tratadas como criminales”.
Los manifestantes exigieron que el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) se mantuviera alejado de sus comunidades, especialmente de sus escuelas.
“Tenemos que contraatacar”, dijo Marisol Durán, profesora de preparatoria de la Asociación de Educadores Raza de San Diego.
Un grupo de danzantes aztecas encabezó la marcha de una hora desde el histórico Parque Chicano por las calles de Logan Heights.
Mientras caminaban por la Avenida Imperial, los curiosos salieron de casas y negocios para presenciar y grabar la marcha con sus celulares. “Únete pueblo”, decían algunos manifestantes, invitándolos a unirse.
Original Story
San Diegans hit streets to demonstrate for labor, protest immigration policies on May Day
