Las familias de personas que han muerto en las cárceles de San Diego se reunieron el pasado fin de semana en Escondido para conocer a la mujer encargada de liderar un nuevo esfuerzo para reducir las muertes en custodia en las cárceles de California.
Allison Ganter fue nombrada en octubre para dirigir la División de Revisión de Muertes en Custodia de la Junta de Correcciones Estatales y Comunitarias (BSCC, por sus siglas en inglés), una autoridad independiente creada en 2012 para monitorear las cárceles y centros de detención juvenil de California, entre otras tareas.
La senadora Toni Atkins (D-San Diego) fue la autora de la legislación que creó el puesto de Ganter. Atkins dijo en una entrevista el año pasado que fue motivada por la investigación de varios años de The San Diego Union-Tribune sobre la alta tasa de muertes en las cárceles locales y por una dura auditoría estatal de 2022 que instaba a los legisladores a actuar para abordar las muertes en custodia.
“El impulso es por San Diego, pero esto es un problema a nivel estatal,” dijo Atkins al Union-Tribune en abril de 2023. “El año pasado hubo 18 muertes en las cárceles de Riverside y siete en Los Ángeles este año. No es solo un problema de San Diego. Hemos sido la punta de lanza.”
El proyecto de ley de Atkins fue firmado por el gobernador Gavin Newsom el año pasado, junto con una legislación escrita por la asambleísta de San Diego Akilah Weber, que aumentó los requisitos de verificaciones de seguridad y ordenó a la BSCC desarrollar y adoptar regulaciones para mejorar la atención de salud mental en las cárceles.
Ganter les dijo a los asistentes el sábado por la noche que está comprometida con la reducción de muertes en las cárceles.
“Desarrollaremos políticas, procesos e informes que den enfoque y transparencia a las muertes en custodia,” dijo.
Hasta ahora, su oficina cuenta con un equipo de dos personas — Ganter y un investigador de datos. Ella dijo que la Legislatura estatal tendrá que aprobar fondos para que pueda agregar personal con experiencia en salud mental y atención médica.
“Les animaría a que operen con un sentido de gran urgencia,” dijo Dan Yates, cuyo hijo, Brandon, fue asesinado en la Cárcel Central de San Diego a principios de este año. “Hay personas aún en prisión que podrían convertirse en una estadística.”
Muchos asistentes se sorprendieron al enterarse de que las revisiones se basarán en la información que los departamentos del sheriff proporcionen a Ganter e incluirán solo las muertes ocurridas dentro de una cárcel.
Si una persona murió en el camino hacia la sala de emergencias, o horas o días después de ser ingresada en un hospital, su muerte no sería revisada por la oficina de Ganter.
Paul Parker, quien dirigió la Junta de Revisión de Cumplimiento de la Ley de Ciudadanos del Condado de San Diego hasta principios de este año, dijo que esas muertes deben ser incluidas. Modificar la ley requerirá una nueva legislación, dijo Ganter.
“Les imploro que ayuden a hacer ese cambio,” dijo Parker a Ganter. “Muchas veces, el incidente que llevó a la muerte comenzó en la cárcel.”
La reunión fue organizada por Saving Lives in Custody California, una organización sin fines de lucro creada por Michael y Paloma Serna, cuyos hija Elisa murió en una cárcel de San Diego en 2019. En julio, el Condado de San Diego acordó un acuerdo de $15 millones con los Serna, cuya demanda reveló que Elisa murió por negligencia médica.
Los asistentes también instaron a Ganter a investigar por qué las personas que padecen enfermedades mentales o, como Elisa, luchan contra la adicción a las drogas, están sobrerrepresentadas entre las muertes en cárceles.
El hermano de David Settles, Matthew, murió por suicidio en agosto de 2022 en el Centro de Detención George Bailey. Antes de ser encarcelado, Matthew estaba bajo tutela, lo que significa que no podía cuidar de sí mismo sin asistencia.
A pesar de esto, fue transferido a una cárcel sin unidad psiquiátrica y colocado en segregación istrativa.
“Estaba completamente aislado, sin tratamiento,” dijo Settles a Ganter.
Ganter agradeció a las familias por compartir sus historias.
“Han creado un movimiento a partir de tragedias,” dijo.
Ella señaló que su división será la primera de su tipo en los EE. UU.
“Queremos hacer esto bien,” dijo. “Reconozco la necesidad de urgencia, pero quiero ser realmente, realmente cuidadosa.”
Grace Jun, una abogada que representa a familias de personas que han muerto en custodia, dijo que Ganter está en una posición única porque la BSCC es responsable de promulgar los estándares que deben seguir las cárceles.
Si las revisiones de muertes identifican un patrón o tendencia, “podrían promulgar regulaciones más estrictas,” dijo.
“Esa es un área donde la BSCC puede tener algo de peso,” agregó. “Si lo ejercerán o no depende de ellos.”
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